domingo, 28 de junio de 2009

EL MEJOR TRABAJADOR

Los trabajadores son el alma de una empresa, son el mayor activo que un empresario puede tener y sin la ilusión y el entusiasmo de estos, una empresa nunca podrá ser "grande". Todo buen empresario que se precie, tiene que tener bajo mi punto de vista, una cualidad necesaria para ilusionar y entusiasmar a sus trabajadores.
Todas las personas, tenemos problemas, tenemos días buenos y días malos, un día estamos con la moral muy alta y otro la tenemos por los suelos. Por ello, el empresario tiene que ser, aquel que tenga la capacidad de influir de forma positiva, en el animo de sus trabajadores, para que estos vean su trabajo, con ilusión y que el ir al trabajo, sea para ellos, algo positivo en sus vidas. No hay que olvidar, que un trabajador se pasa la tercera parte del día en su puesto de trabajo y por ello, si no esta a gusto, es muy difícil que aporte a la empresa lo mejor de él.
Hay tres clases de trabajadores, y para definirlos, lo voy hacer utilizando un viejo oficio como es el de cantero.

Se acerco un día, un experto en selección de personal a una cantera de la edad media. Allí había canteros picando piedras, se acerco al primero que vio y le pregunto... ¿Que hace usted?, el cantero le respondió... ¡¡ pues no lo ve usted, picando piedras ¡¡. Se acerco a un segundo cantero y le pregunto a este...¿Que hace usted?, y este le respondió... ¡¡ picando un sillar ¡¡, pero no me entretengo usted, porque si consigo hacer todos los que pueda en una jornada mi maestro me pagara 10 marabedi por cada uno de ellos, por esto le pido por favor, que no me entretenga y no me haga perder tiempo porque ganaré menos al final del día. Por ultimo se acerco a un tercero, y le preguntó... ¿Que hace usted?, y este le respondió, ¡¡ Construyendo una Catedral ¡¡. Este ultimo trabajador, era el que más implicado estaba de los tres. El se sentía parte, de una gran obra.
Tenemos que conseguir, todos aquellos que tenemos personal a nuestro cargo, que todos ellos se sientan constuctores de catedrales, ello sera fundamental para que nuestras empresas prosperen.

jueves, 25 de junio de 2009

LOS AFILADOS COLMILLOS DE EUROPA

TRIBUNA: Nicole Muchnik
Nicole Muchnik 24/06/2009

No deja de ser extraordinario que hayamos padecido una campaña para las elecciones al Parlamento Europeo sin que se haya hablado de Europa. Como también lo es el que los recién elegidos diputados del partido socialista, en compañía de los partidos de derecha y extrema derecha representados en el Parlamento, se apresten a confirmar al presidente Barroso en su mandato. Pero quizá debiéramos interrogarnos sobre lo que representa José Manuel Durão Barroso al frente de la Comisión Europea. En tanto que salvaguardia de los tratados, la Comisión propone leyes y vigila su aplicación. Barroso, que preside la Comisión desde 2004, estrenó su investidura proponiendo que en la Constitución Europea se hiciera mención a "las raíces cristianas" del continente. Abiertamente devoto, está sostenido e inspirado por redes católicas. Próximo al Opus Dei, cuya capacidad de influencia es conocida, Barroso consulta a sus "expertos" cada seis meses en busca de proyectos y propuestas. Así, cuando la Comisión se preocupó por la transparencia de los casi 15.000 lobbies instalados en Bruselas o Estrasburgo -tales como la poderosa Comisión de los Episcopados de la Comunidad Europea (Comece), un lobby de la Iglesia católica encargado de "acompañar y analizar el proceso político de la Unión Europea", o la Oficina Europea de los Jesuitas (OCIPE), o "Iglesia y Sociedad", de obediencia protestante y ortodoxa-, la decisión al respecto fue la de excluir de todo control a las "comunidades de fe" (art. 17). Estas entidades están físicamente presentes en Bruselas y en Estrasburgo. Otra de ellas, la Cienciología, objeto de un proceso judicial en Francia, ocupa tres pisos de oficinas en Bruselas. Y el BEPA (Bureau of European Policy Advisers), creado en 2004, coincidiendo con la elección de Barroso, agrupa a 68 comunidades y asociaciones religiosas y a sectas de toda obediencia, desde católicas a judías, pasando por el islam o el instituto europeo de la Sokka Gakkai , que agrupa a 12 millones de fieles budistas en el mundo. La misión del BEPA es proporcionar consejo político a la Comisión y participar de modo transversal en sus actividades. Y todas esas iglesias reciben subsidios de la Comisión.

José Manuel Durao Barroso
'Lobbistas' de confesiones religiosas y de multinacionales aconsejan a Durão Barroso
En Estrasburgo, antes de la sesión plenaria, los diputados son invitados a un desayuno de oración ecuménica. Mientras que en Bruselas, en la pequeña capilla de Europa, las misas están previstas a la hora del almuerzo.
Para hacerse una idea de hasta qué punto se hallan estrechamente imbricadas la Iglesia católica y la economía, recordemos que cuando Benedicto XVI reunió a un importante areópago en el Colegio de los Bernardinos durante su visita a París, en la primera fila de su público se hallaban presentes los más grandes patrones de empresa de Francia: Axa, Areva, Publicis, Virgin, Mobile... Los mismos que más tarde se verían implicados en la crisis financiera.
Ahora bien, tanto en Bruselas como en Estrasburgo, las multinacionales también ocupan posiciones por sí mismas. Citemos, a la SEAP (Society of European Affairs Professionnals), domiciliada en París y Bruselas, que da cobijo a Carrefour, L'Oréal, Gaz de France, Unilever, Nestlé, Coca-Cola y Danone, sociedades todas ellas que ofrecen generosamente la ayuda de sus expertos. De este modo, quienes son responsables de la debacle financiera internacional son los mismos que son llamados a dar sus consejos para vigilar, por ejemplo, la especulación internacional.
Otro ejemplo: elegido por Barroso como consejero para reforzar la supervisión financiera, el "experto independiente" Jacques de Larosière copreside Eurofi, tras la que se acogen Axa, Fortis, Natexi y Dexia, todas ellas más o menos salvadas de quiebras o implicadas en casos de subprimes y de "paracaídas dorados".
Podemos preguntarnos si estos expertos son el mejor acompañamiento posible para enfrentarse a una crisis económica de esta envergadura, que afecta ante todo al común de los mortales. Por no hablar de la necesaria apertura hacia las necesidades vitales de otras regiones del planeta.
Se podrían citar ejemplos de decisiones tomadas fuera no ya de la ética, sino de todo buen sentido. Así, en materia de política agrícola las ayudas se destinan principalmente a los grupos industriales y no a los agricultores. Nos enteramos de que los príncipes de Mónaco recibieron una subvención por su predio de alrededor de 200.000 hectáreas. O que Doux, el mayor industrial francés del pollo, con cerca de 2.000 millones de facturación en 2008, ha recibido 60 millones de euros. Y Sucden, una multinacional del azúcar de origen francés, lo mismo.
Sin embargo, a juzgar por el Tratado de Lisboa, aprobado en diciembre de 2007 pero aún no ratificado por todos los Estados miembros, no todo es malo en las intenciones escritas. Así, el Tratado se pronuncia claramente sobre los valores fundamentales de Europa y sitúa a la dignidad humana y la solidaridad en el primer plano de esos valores, por delante de la libertad, la democracia y la igualdad. Los objetivos primordiales de la Unión incluyen la paz, el pleno empleo, el desarrollo sostenible, el comercio libre y equitativo, la eliminación de la pobreza, la protección de los Derechos del Hombre y el respeto del derecho internacional. Por tanto, para quienes creen en la letra impresa, toda esperanza aún no está perdida.
Nicole Muchnik es periodista y pintora. Traducción de Juan Ramón Azaola